HISTORIA (estructura Conde Lucanor)
Otra vez, hablando el Conde Lucanor con Patronio, su consejero, le dijo que estaba confuso y no sabía qué podía hacer, ya que a una dama quería conquistar, pero por miedo al rechazo, su amor no se atrevía a declarar.
-Señor Conde Lucanor -dijo Patronio- ,bien sé que hay muchos consejeros como yo, y bien sé que mi consejo no os hace mucha falta, pero cómo confíais en mí, debo aconsejaros que a esa dama os tenéis que arriesgar, pues las probabilidades de fracasar son las mismas que de triunfar. Y vuestro problema me ha hecho recordar la historia de lo que le sucedió a un pobre campesino con una dama de nobleza.
El Conde Lucanor, le pidió que le contara la historia.
-Señor -dijo Patronio- ,había una vez un campesino, el cual estaba muy enamorado de una joven noble, hija del príncipe, que pronto sería coronado rey. Pero, aquel pobre campesino, no era el único enamorado de aquella dama, claro estaba, porque era una mujer muy bella y también de gran corazón.
El campesino, pensó muchas veces en declararle su amor por ella, pero siempre que tomaba la decisión se arrepentía y nunca llegaba a hacerlo.
Los temores a declararse,del campesino, resultaban ser no estar a la altura de la princesa o que no supiese cómo tratarla y además el padre era muy exigente. Pero lo que más temía, no era que el padre de la dama le rechazara, sino que la misma dama lo hiciera, ya que sabía que muchos amigos suyos habían intentado declararse pero más que rechazos no habían logrado.
El campesino, dejó pasar los años, el príncipe pasó a ser coronado rey, y la joven hija a ser princesa. Mientras, el campesino había dejado pasar los años sin demostrar intento alguno y pensando si de verdad la princesa le querría de verdad, si algún día llegara a pedir su mano.
Los años siguieron pasando, y el rey, padre de la princesa murió, lo que significaba que la princesa, iba a ser coronada reina. Habían pasado 37 años desde que aquel campesino se enamoró de ella y no había sido capaz de expresar sus sentimientos ante la dama hasta ese año.
Se presentó en su castillo y le dijo "Oh dama mía, de la que años y años enamorado llevo, y de los cuales ningún sentimiento he demostrado. Después de un largo tiempo me atrevo a pedirle su mano cómo amada.". La princesa, ya pronto reina le contestó, "Oh campesino mío, si de estos sentimientos que sentíais hacia mi persona los hubiese yo sabido hace 37 años atrás, desde que se enamoró de mí, sin duda alguna le hubiese dicho que sí.Voy a ser coronada reina, y un rey me hacía falta, pero siento comunicarle, que muy lento usted fue y de que a mi rey, que se declaró antes que usted, al fin hallé".
El campesino, muy apenado, decidió volver a su morada, dónde días más tarde, murió de pena y de amor."
El Conde Lucanor, después de oír esta impactante historia quedó sin palabra alguna.
-Vos, Conde -prosiguió Patronio- ,que aún estáis a tiempo, le aconsejo, que no siga el mismo camino que este pobre campesino y no pierda su oportunidad.
El Conde Lucanor, vió que Patronio le había aconsejado muy bien, así que sus
consejos siguió, y le fué muy provechoso hacerlo así.
Y, considerando Don Juan la sabiduría de este cuento, lo mandó escribir en este libro e hizo estos versos que condensan toda su moraleja:
Si a una dama u hombre deseas conquistar, o a cualquier problema que se os pueda aventurar,
no lo hagáis esperar, ya que las mismas esperanzas tendrás de resultar vencedor o perdedor,
y no merece la pena, que por tiempo, perder la querida elección.